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Hábitat y Calidad de Vida - Blanca Durango

 

DOCTORADO: CIENCIAS PARA EL DESARROLLO ESTRATÉGICO (AMBIENTE).
UNIVERSIDAD BOLIVARIANA DE VENEZUELA UBV CEDE MATURÍN.
MATURÍN, EDO MONAGAS, VENEZUELA

Cuando se piensa en desarrollo humano se asocia al desarrollo de la sociedad y la mejora continua de la calidad de vida y a suplencia en la medida de lo posible de sus necesidades básicas. Pero a veces sin pensar en las consecuencias que se ven venir. En este caso el desarrollo viene asociado al alto uso de la tecnología la cual le ha permitido al hombre transformar el ambiente. La explotación desmedida y la inadecuada administración de los recursos naturales y su empleo poco consiente, unido al aumento agigantado de la población y al despilfarro de la misma, se está produciendo un declive cada vez más acelerado a nivel ambiental que desequilibra el planeta y genera consecuencias graves.

El inicio de todo este caos se genera con el origen de las revoluciones industriales que tuvieron lugar en los siglos XVIII y XIX y la revolución científico tecnológica en la segunda mitad del Siglo XX, que llegó para transformar las condiciones de vida y la manera de comprender nuestra forma de vivir. En nuestro continuo proceso de interacción y transformación se han visualizado grandes avances tecnológicos a todo nivel y en especial en el campo de las comunicaciones, la medicina, economía, ciencia, educación entre otros. Más sin embargo se vienen alertando de los inadecuados usos de los logros de la ciencia. Quiero hacer énfasis para recordar en este texto casos como la gran detonación a nivel nuclear que pasó a la historia por el grado de destrucción a todo nivel en 1945 en Hiroshima. Dicho acontecimiento condujo el impacto, directo a la población y por ende a nivel ambiental. Una tecnología muy avanzada que destruye vidas. Sobre esto hay mucha tela que cortar. De la misma manera se ha visualizado la inadecuada administración de los recursos por parte de grandes empresas que sólo se interesan por la producción, en este caso me dirijo más que todo a las multinacionales en busca de explotación de recursos, tanto naturales como humanos, sin medir consecuencias. Esto ha provocado un gran desequilibrio y deterioro de los ecosistemas. Fenómenos tales, como el calentamiento global, la emisión de gases de efecto invernadero (CO2), desertificación, tala, quema y otros impactos que hacen cada vez más difícil la existencia del planeta tierra. Las consecuencias de estas problemáticas se ven en los indicadores físicos, como afectaciones en la piel, enfermedades respiratorias, malformaciones, contaminación de ríos y cuerpos de agua entre otros. 

Se puede decir según mi crítica que esa tecnología usada es una estrategia disfrazada para obtener o conservar poder por parte del capitalismo, quien manipula de manera escondida la economía y afecta el pensamiento humano, el cual se deja llevar por el consumismo severo y el derroche. Unido a esto está también lo que tiene que ver con la innovación científica y tecnológica de los países desarrollados e industrializados. 

Se reconoce también que buena parte de la población se ha visto beneficiada por estos logros de la ciencia sobretodo en el campo de la salud. No cabe ninguna duda que la humanidad se ha trasformado más rápidamente en los dos últimos siglos, que en todos los siglos anteriores de historia y esto es una buena movida gracias al avance tecnológico. Mas sin embargo hay una parte detrás de cámaras que no se logra evidenciar y se trata de que el auge de este supuesto desarrollo es el estancamiento y deterioro del valor de la vida, es la causa de la migración de las especies no solamente las poblaciones que hacen vida en los campos y áreas abiertas, como nuestros campesinos e indígenas, sino también se trata de la migración de las especies de nuestra fauna que al no conseguir los factores y elementos necesarios para subsistir se extinguen.

Es importante destacar que, en la conferencia de Estocolmo en 1.972, se planteó la necesidad de una Educación Ambiental, y se recomendó su adopción a todos los niveles de enseñanza. La Educación Ambiental da acompañamiento al giro que debe dar la sociedad en busca del desarrollo sostenible. No es fácil hablar de desarrollo y a la vez de ambiente, pareciera una total contradicción que quiebra cualquier intento de sostenibilidad, considerando que la necesidad de proteger el planeta y sus recursos naturales, no puede ser otra cosa que el tratar de mejorar la calidad de vida de nosotros como personas en armonía, equilibrio y felicidad. Esta formación desde la educación ambiental debe venir de la mano del Estado y respaldada por la legislación ambiental vigente, iniciando obviamente por la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. De la misma manera debe hacer énfasis en el conocimiento de nuevos saberes que impulsen las medidas a tomar en beneficio de propuestas y estrategias para mitigar los impactos negativos y fulminantes al ambiente. Es por esta razón que, en este espacio quiero resaltar el pensamiento de Enrique Leff, quien nos invita a trasladar la universidad y sus cuatro paredes a las comunidades en busca de retirar las máscaras y aprender cómo se hacen las cosas en otros lugares y bajo qué criterios. Dando asi la posibilidad de ampliar nuestros conocimientos y los de otros que quizá al principio parezcan alocados y fuera de orden, pero que, puedan llevar a desencadenar grandes logros y grandes resultados para el bien común. 

Lo antes expuesto, de la mano con la creación e implementación de políticas públicas ambientales va a perseguir un crecimiento económico, poniendo énfasis en la necesaria implicación de los Estados como ejes centrales y las organizaciones internacionales en busca de hacer mover las estrategias de avance.  Cada país debe adoptar un enfoque integrado que asegure el desarrollo con la protección, conservación y mejora del ambiente. Para ello, se hace referencia a la importancia de utilizar la ciencia y la tecnología para lograr dicho objetivo, así como la educación y la adecuada difusión de la información acerca de esta materia en los medios de comunicación. Se busca que cada Estado sea soberano de explotar sus recursos naturales elaborando sus propias políticas ambientales, siempre que estas se desarrollen dentro de su jurisdicción y no causen daños al ambiente y a otros Estados. Esto quiere decir que hay contradicción entre desarrollo (Ciencia y tecnología) y Ambiente, SI y SOLO SI, se enfoca de manera irresponsable buscando producción, arriesgando recursos. Más, sin embargo, viéndolo desde otra perspectiva se puede buscar el desarrollo tecnológico si se trabaja en conjunto con las políticas públicas ambientales. Dichas políticas pueden ser sugeridas por los ciudadanos sentidos y que viven el día a día dentro de su comunidad con problemáticas severas a nivel ambiental.

En este mismo orden de ideas, si se va a dar una gran inversión en ciencia y tecnología se debe tomar como una gran esperanza para proteger y salvaguardar los recursos naturales del planeta. Por ello se considera una prioridad elaborar políticas ambientales relacionadas con la promoción de las energías renovables y limpias y la medición de los ecosistemas. Pero no solo es necesaria la supervisión de estos ecosistemas, sino su adecuada conservación y protección. Para ello en las zonas más vulnerables se estima conveniente crear áreas protegidas, pero siempre previa concienciación de los ciudadanos. En este caso en particular, podemos mencionar El Área de Protección Especial (ABRAE). Reserva Nacional Hidráulica Rio Guarapiche. La cual es el origen del abastecimiento del agua a la mayor parte de la población Monaguense y la cual merece un respaldo total en cuanto a su conservación y protección en busca de evitar al máximo su deterioro e impactos negativo a sus ecosistemas. En este mismo orden de ideas es necesario para tal fin dejarnos arropar por la legislación ambiental vigente y de la misma manera ser responsables de cada uno de los procesos que llevamos a cabo por simple que sea. Es vital traer a colación que el río Guarapiche y su área de influencia se caracteriza por presentar un maravilloso potencial a nivel de diversidad biológica, lo que lo convierte en un ecosistema altamente frágil y susceptible a ser impactado negativamente por cambios, tanto en su estructura como en su equilibrio dinámico. La principal meta de una política ambiental es lograr un desarrollo sostenible. Para ello, una política de estas características debe tener en cuenta la conservación de los ecosistemas y la biodiversidad, de forma que asegure la capacidad de los recursos naturales para producir bienes y servicios.

La necesidad de este tipo de políticas viene dada por una serie de hechos que derivan en daños sustanciales para el planeta; empresas que llevan a cabo sus actividades sin ningún tipo de control ambiental, la creciente deforestación o la explotación y la inadecuada administración de los recursos naturales. Por otro lado, hay que propulsar la coordinación entre países para ejecutar políticas ambientales de corte internacional para mitigar o erradicar problemáticas que afectan a todo el planeta. 

En conclusión, no es fácil concienciar, incentivar e implicar a la ciudadanía a remar en una misma dirección, es un trabajo arduo que a veces pensamos que suena fácil, pero en realidad es incansable y no es más que una locura de algunos pocos para tener algo de qué hablar porque quizá esté de moda. Tenemos armas poderosas, la formación desde la Educación Ambiental con énfasis en la participación ciudadana y desde allí la propuesta de políticas públicas que respalden el esfuerzo y la iniciativa comunitaria a nivel del Estado. Si las políticas públicas se hacen sentir y se cumplen como tal, los proyectos ambientales serán un tiro al suelo y de esta manera el desarrollo sustentable no será un sueño planetario en busca de beneficio.



Blanca Durango
C.I. V-19.775.385
Microbiólogo Industrial
PDVSA
DURANGOB@pdvsa.com