PASIÓN POR APURE
El apureño es bravío,
de coraje, él está hecho;
caliente como el estío,
la pasión lleva en su pecho.
Al combate que lo espera,
decidido siempre acude;
gallo de pico y de espuelas,
¡Ejemplo de juventudes!
En las faenas del llano,
¡Veguero de corazón!;
su desnudo torso ufano,
del trabajo a pleno sol.
del trabajo a pleno sol.
Del canto es apasionado,
del arpa, cuatro y maracas;
del corrío contrapunteado
y del bramar de las vacas.
Amor siente por el llano,
sus esteros y sabanas,
cachapas con queso e'mano
y la rica carne asada.
Lo enamoran sus mujeres,
los juegos, la muchachada;
de la faena, sus quehaceres,
y el café de madrugada.
Después de ordeñar las vacas,
culminada la faena,
la tapara trae a casa,
de leche caliente llena.
Y la mujer del Apure
no sé amilana ante nada,
que el afán siempre le dure,
con su pasión denodada.
Nuestras mujeres amadas,
son un manantial de amores;
con sus faldas ataviadas
y sus guirnaldas de flores.
Arpista encienda la mecha
maraquero a las maracas
ya el joropo marcó fecha
de Guasdualito a Biruaca.
Mil llaneros en la historia,
son lanceros y centauros;
llenando a Apure de gloria,
Y a Venezuela de lauros.
Rindo honor a los nativos
de éstas tierras apureñas
de la patria, el genio vivo,
de la candela, la leña;
de Pedro Camejo, hijos;
¡Y de Páez llevan su enseña!
de éstas tierras apureñas
de la patria, el genio vivo,
de la candela, la leña;
de Pedro Camejo, hijos;
¡Y de Páez llevan su enseña!