La Semana Santa es la fecha cristiana que cuerda los últimos momentos de Cristo en la Tierra: la pasión, la muerte y la resurrección; es decir, desde que llega a Jerusalén proclamado Salvador, hasta que es arrestado, procesado, muerto, enterrado y resucita.
La Semana Santa comienza con la celebración del Domingo de Ramos, que tiene lugar el domingo anterior al Viernes Santo. Pero por medio de otras fuentes históricas, se dice que la Semana Santa tiene sus inicios en las festividades paganas, de la diosa Astarté, una diosa mesopotámica, que para los griegos vendría a ser Afrodita.
En el año 325, el Concilio de Nicea estipula la fecha de celebración de Pascua para todo el ámbito católico occidental. Desde ese momento cada país ha ido construyendo un conjunto propio de celebraciones, ya que la finalidad mundial principal es celebrar o rememorar la pasión, muerte y resurrección de Jesús.
Esta Semana Santa está compuesta por días, en donde cada uno de ellos tiene un significado especial y esencial a la hora de celebrar esa ceremonia tan crucial para muchas personas del mundo.
Esos días son de suma importancia, pues fueron muy significativos en el actuar de Jesús. Un ejemplo muy claro es el Viernes de Dolores, en el que se manifiesta todo ese dolor expresado por la Virgen María durante la crucifixión de Cristo.
Adicional a este día, es de gran importancia el Domingo de Ramos, en el que se representa el inicio de esa semana y el final de la Cuaresma.
El domingo de Pascuas se celebra desde la noche del sábado y las Misas del Día de Pascua son una prolongación de esta celebración.
El Viernes Santo es considerado uno de los días más intensos a la hora de hablar de la Semana Santa o Semana Mayor, debido a que se hace memoria a la pasión de Cristo, tal como su crucifixión y, finalmente, su muerte. Durante 24 horas las personas creyentes de esta religión manifiestan su fe haciendo un ayuno de cualquier tipo de carne, así como otros deseos mundanos que en ese momento no son relevantes.
Para finalizar con la fiesta central de los cristianos, está el Domingo de Resurrección, que conmemora la resurrección de Jesús tres días después de dar la vida por todas las personas que habitamos ahora mismo la tierra.
¿Quién inventó la Semana Santa y por qué?
Desde el siglo II, después de Cristo, se organizó la Semana Santa como la conmemoración del triduo sagrado: la pasión, la sepultura y la resurrección del Señor. El nuevo calendario litúrgico instituyó la Semana Santa, destinada a recordar la pasión de Cristo a partir de su ingreso a Jerusalén.
La Semana Santa o Semana Mayor como se le llamaba antiguamente, son los días en que se conmemoran los grandes acontecimientos de nuestra redención: la Pasión, la Muerte y la Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo.
¿Cuándo se empezó a celebrar la Semana Santa en el Mundo?
Los primeros en celebrar la Semana Santa luego de su institución fueron los judíos conversos al cristianismo. Poco tiempo después, los primeros romanos adoptaron el cristianismo como su nueva religión. Los primeros registros se pueden rastrear hasta el siglo IV.
De igual manera, el espíritu de la Semana Santa ha ido cambiando con el paso del tiempo, por ejemplo, desde el siglo XI, la idea era contemplar la pasión y muerte de Cristo y tratar de sentir lo que él vivió imitándolo con actos de penitencia. En ese sentido el día Viernes Santo se vivía un luto muy riguroso. En este día no se celebraban la Eucaristía, no se ofrecía paz en los actos litúrgicos, sólo se comulgaba con lo pre santificado. Tampoco se podía tocar instrumentos musicales, se usaba el negro como vestimenta oficial, los Oficios Litúrgicos comenzaban en un silencio absoluto, todos los fieles de rodillas y postrados ante el padre que celebraba la misa.
Una cantidad de prohibiciones traía la celebración de la Semana Santa en nuestra tierra, sobre todo el día Viernes Santo: No se podía comer carne, ni ingerir alcohol, cantar, bailar, cero sexo, ni bañarse en ríos, mar, etc. a riesgo de volverse pescado quien lo hiciera, debías vestirte de negro o de blanco para guardar luto, podías asistir a las procesiones, visitas a los templos, etc.
La Semana Santa actualmente ha mantenido algunas de sus costumbres iniciales y los fieles acuden a los rituales establecidos desde hace siglos.
Los autores de los evangelios son Mateo, Juan, Lucas y Marcos. De estos, los dos primeros figuran en las listas de los doce Apóstoles y los otros dos figuran como discípulos de San Pablo y San Pedro respectivamente. Los Doce Apóstoles de Jesús fueron: Pedro, Santiago, Juan, Andrés, Felipe, Judas Iscariote, Mateo, Tomás, Santiago, hijo de Alfeo, Bartolomé, Judas Tadeo y Simón.
Es de hacer notar que tiempo después se instituyó la celebración de la Última Cena el 1°
de abril del año 33 después de Cristo.
La dinámica moderna ha permitido que, a través de los equipos móviles de telefonía, la palabra de Dios llegue desde el sacerdote hasta la feligresía, quien por variados motivos no pueda asistir a las iglesias, pueda a través estos versátiles equipos escuchar la misa desde su hogar o cualquier otro sitio donde se encuentre. No podemos detener la marcha del progreso y la tecnología; por eso debemos adaptarnos a este proceso y aprovechar sus ventajas en todos los campos educativos, profesionales, científicos, humanísticos, tecnológicos, domésticos, públicos, privados, etc. para combatir la abulia, el pesimismo, el odio entre nuestros congéneres, la depresión que causa enfermedades y muertes. Si apartamos el resentimiento, la discordia, el egocentrismo, la maldad y otros males que aquejan al planeta nuestro.
Ojalá que este recorrido nos permita reflexionar en esta fecha cuaresmal, no para darnos golpes de pecho y gemir “Mea Culpas”, sino para abrir nuestros sentidos como hijos de Dios, sin distingos de razas, credos, ni colores; conscientes de que, en esta Tierra de Gracia nuestra, todos tenemos sangre indígena, africana, europea, eslava, judía, china, japonesa y pare usted de contar. Y, además; ese talento que poseemos todos los venezolanos, con muy pocas excepciones, ha hecho brillar a Venezuela a través de aquellos hijos que, por alguna circunstancia, tuvieron que emigrar y que hoy, muchos de ellos han descollado como grandes profesionales o como notorios venezolanos que dan la talla en cualquier campo y enaltecen nuestro gentilicio
Por
Dionisio Núñez Garantón
Historiador
